martes, 28 de junio de 2016

EL AM NO ES SOLO NOSTALGIA


Pronto celebraré 40 años en radio. Agradezco a todos quienes se han interesado en este Blog, carente de tantas cosas pero que por eso mismo constituye un desafío permanente en mi actividad como radio aficionado.

En 1976 obtuve mi licencia de Aspirante (1013), sin embargo mis primeros pasos se remontan a los tiempos en que la radio constituía un imán poderoso, en torno al cual se reunía la familia a la espera de  noticias, música, el radioteatro, el show de estrellas locales o programas que invitaban al interés por conocer el mundo, su historia y sus personajes. En el año 1969 el hombre pisaba la luna y yo comenzaba a transitar por la Onda Corta y sus sonidos misteriosos. Radioemisoras intercontinentales  me alertaban y advertían que el mundo era extenso, variado, pero también cercano. Nunca olvidaré el sonido de los radioteletipos de alguna ignota agencia informativa, el clic, clic, clic, de la WWW, o el susurrar de las emisiones en telegrafía.

A los 9 años había viajado mucho para un niño de mi edad y  logré memorizar casi todos los nombres de las estaciones ferroviarias desde Santiago a Puerto Montt, sucedió entonces que cuando oía a un radio aficionado mencionar el nombre de Mafil, Pitrufquen, Collipulli o Laja en mi viejo receptor transistorisado RCA Globe Trotter de dos bandas, en el que usaba el somier metálico de mi cama como antena y en AM, por supuesto, sentía felicidad… o algo muy parecido a ello.

Trasnochaba escuchando a los radioaficionados… el colegio no era para mi. Contradictoriamente al estilo imperante en la enseñanza escolar, solo me interesaba la radio, la electrónica, la astronomía, la física, la filosofía, la mineralogía, la literatura, la fotografía, la magia, la música  y la química. La Radio me permitió vislumbrar y conocer esos mundos y a muchas personas entrañables hoy.

Pocos tiempo después de obtenida mi licencia (1976)  el SSB se imponía sobre el AM definitivamente, pensé en abandonar la radio muchas veces. No pude sucumbir al "encanto" del BLU. Su desagradable sonido y su carácter netamente comercial no concordaban con mis intereses. Poco me importaba su "eficiencia" y no tenía anhelos de llegar lejos (DX). Continué en AM. 

Luego me dí cuenta de la mala calidad de transmisión de la mayoría de las estaciones de AM de aquellos tiempos (también de la mía propia) y a su vez de la enorme falta de conocimiento electrónico por parte de nosotros sus operadores, las que creaban toda suerte de  problemas, creencias erradas, desencuentros,   que los encantados o adeptos del SSB esgrimían como argumento para DESACREDITAR las emisiones de modulación de amplitud. Otro factor que predominó fue el competitivo. No era lo mismo transmitir con un equipo de 1000 dolares "made in japan" que hacerlo con un Tarrito Casero Hechizo ( eufemismo que quería decir que teníamos un transmisor de porquería) También tener un BLU daba estatus, así es que los que aun transmitían en AM -y aunque nadie lo decía se pensaba- era gente "pobre" y OFF.

Haciendo honor a la verdad muchas estaciones de AM de aquella época efectivamente emitían en pésimas condiciones (Zumbido, modulación de frecuencia, tirones al oscilador, demasiado ancho de banda, alta distorsión,  sobremodulación, corrimiento e inestabilidad en el oscilador, interferencias en la TV y el teléfono, etc. etc.). Esto me condujo al estudio de la electrónica de manera autodidacta, acrecentando mi intención de permanecer en AM y mi gran afecto por esta modalidad.

 Decidí realizar el ultimo llamado general CQ en AM la noche de año nuevo, cuando se recibía el año 2000. No fue el último llamado general. Ya no sé cuando será el último CQ y no pretendo abandonar esta actividad mientras viva. 

Actualmente,  quienes  auto construyen sus equipos son gente "extraña" y difíciles de encontrar.  Los HandBook´s se han convertido en libros para decorar alguna estantería, y escuchar conversaciones técnicas de nivel medio o superior entre tanta charla mediocre: un lujo.

Famosos  radio experimentadores han sucumbido a la síntesis China. Ya está todo hecho, es cosa de ensamblar circuitos. Los años pasan.  Todos quieren estar “conectados” sin embargo pocos lo están de verdad.

El AM es una modalidad en donde encuentro una extensa gama de posibilidades de experimentación y construcción, muy superiores a las del SSB.

En la actualidad trato de simplificar  y optimizar mis circuitos existentes entre el micrófono y la antena. 
Regresar a lo simple sin perder calidad ni eficiencia es un gran desafío.